Este año hemos querido sumarnos a la tradicional subida montañera al Trevenque, consistente en subir al citado pico vestidos de pastorcillos y llevando en los zurrones los presentes para el Niño Jesús, como mantecados, polvorones, alfajores, hojaldrinas, chocolates, tortas, licores, vinorrio y cosas por el estilo.
Como el Niño no tenía ganas de tomar nada, pues nos lo comimos nosotros.